El gobierno utiliza la pausa para reevaluar su estrategia de inmigración
El gobierno de Quebec está suspendiendo dos vías principales hacia la residencia permanente como parte de una reevaluación de su estrategia de inmigración. Durante los próximos meses, el gobierno de Legault dejará de emitir Certificados de Selección de Quebec (CSQ), un documento esencial en el proceso de inmigración, para inmigrantes económicos y estudiantes extranjeros que aplican a través de dos de sus principales vías hacia el estatus de residente permanente.
Esta suspensión afectará a aquellos que desean inmigrar a Quebec bajo el Programa Regular de Trabajadores Calificados y la vía para graduados del Programa de Experiencia de Quebec (PEQ).
En una conferencia de prensa el jueves, el ministro de Inmigración, Jean-François Roberge, calificó la decisión de «valiente», argumentando que de no hacerlo, Quebec alcanzaría casi 70,000 residentes permanentes.
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El gobierno dijo que usará este periodo para reducir el acumulado de solicitudes en el sistema y reevaluar su política de inmigración.
El moratorio estará vigente hasta el 30 de junio de 2025, momento en el cual se presentarán las directrices para un nuevo plan plurianual que, por primera vez, tomará en cuenta el número de personas con permisos temporales de trabajo y estudio en Quebec.
En agosto, Quebec anunció una pausa de seis meses para ciertas solicitudes de trabajadores extranjeros temporales en Montreal y, a principios de este mes, introdujo una ley para limitar el número de estudiantes internacionales en la provincia.
Objetivos de inmigración más altos para 2025
El jueves, Roberge también anunció su proyección de inmigración para 2025 en la Asamblea Nacional, que incluye aumentar su objetivo de inmigración permanente.
El próximo año, Quebec podría tener 10,000 residentes permanentes más de lo esperado, gracias a la popularidad creciente de la vía para graduados del PEQ. La cifra pasaría de 3,800 estudiantes en 2024 hasta 15,000 en 2025, teniendo en cuenta la nueva pausa. Sin esta pausa, ese número podría haber alcanzado los 19,000, según el ministerio.
“Viendo que el número podría ser demasiado alto, estamos tomando medidas. Así que estamos en control,” dijo Roberge a los periodistas.
Esto significa que alrededor de 66,500 personas podrían obtener estatus permanente el próximo año, en comparación con los 56,500 planeados por la predecesora de Roberge, Christine Fréchette.
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Al ser preguntado sobre la diferencia entre estos umbrales y la declaración del primer ministro François Legault en 2022 de que sería «suicida» que Quebec recibiera más de 50,000 inmigrantes al año, el ministro argumentó que el contexto ha cambiado y que la tasa de inmigrantes francófonos es mucho más alta hoy en día.
Roberge dijo que se proyecta que la provincia reciba a 59,000 recién llegados para finales de este año.
La noticia llega una semana después de que el gobierno federal anunciara planes para reducir su número proyectado de recién llegados.
El gobierno de Trudeau está reduciendo el número proyectado de nuevos residentes permanentes de 485,000 a 395,000 en 2025, con más reducciones a 380,000 en 2026 y 365,000 en 2027.
La oposición critica al ministro por un ‘giro de 180 grados’
El jueves, el líder del Partido Quebequense criticó al gobierno de Legault por cambiar su postura sobre inmigración menos de 48 horas después de que el PQ presentara su plan para reducir sustancialmente el número de residentes permanentes en Quebec.
«Es un giro de 180 grados que el gobierno haya decidido poner un moratorio no solo en la inmigración económica desde fuera de Quebec, como propusimos, sino también en el PEQ,» dijo Paul St-Pierre Plamondon.
Dijo que esto indica que el gobierno está tratando de recuperar el control de sus objetivos.
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El líder interino del Partido Liberal de Quebec, Marc Tanguay, también dijo que el gobierno de Legault está actuando sin dirección clara.
«Es como un gobierno en una carretera resbaladiza dando otro cambio de dirección repentino,» dijo. «Va a afectar la competitividad de Quebec en términos de trabajadores y estudiantes.»
Karl Blackburn, presidente del grupo empresarial Conseil du patronat du Québec, criticó la «improvisación» de los gobiernos provincial y federal en el tema de inmigración, diciendo que sus planes afectan directamente a las empresas de Quebec que dependen de trabajadores calificados para resolver la escasez de personal.
«Si las empresas tuvieran la posibilidad de encontrar trabajadores quebequenses para satisfacer sus necesidades laborales, por supuesto, recurrirían a ellos,» dijo Blackburn.
«Pero desafortunadamente, es como pescar en un lago vacío,» agregó, afirmando que los trabajadores extranjeros son la solución para aliviar la presión en las empresas.
Escrito por Sabrina Jonas, basado en informes de Romain Schué, con archivos de The Canadian Press
