Escrito por Alistair Waters
Publicado por Kelowna Capital News el 6 de septiembre de 2017
Los ciudadanos canadienses más nuevos del país tuvieron una visita sorpresa del primer ministro el miércoles durante su ceremonia de juramentación en Kelowna –y una lección humorística de tolerancia.
Justin Trudeau, que originalmente no estaba programado para asistir a la ceremonia de ciudadanía en Stuart Park, sino que hizo un corto paseo desde el Delta Grand Hotel donde se reunía su caucus liberal, dio la bienvenida a los 60 nuevos canadienses que tomaban el juramento de ciudadanía con el ministro de Inmigración y Ciudadanía Ahmed Hussen.
Y mientras Trudeau estaba hablando de por qué prefiere el término aceptación a la tolerancia, un transeúnte que obviamente no es un aficionado, gritó un improperio ante el Primer Ministro.
Sin detenerse, Trudeau levantó la mirada con calma y dijo simplemente con una sonrisa: -Y yo también lo tolero, señor.
La respuesta rápida trajo las risas de la audiencia, varios de los cuales, dijeron más tarde que estaban encantados de que el primer ministro apareciera.
“(La aparición de Trudeau) hizo mi día”, dijo Francine Nutley, originaria de Gales, quien se mudó a Kelowna hace siete años.
Junto con su esposo Ian y sus dos hijas, Olivia, 9 y Lucía, de 11 años, Nutley dijo que se sentía muy bienvenida en su nuevo país desde su llegada y se sintió orgullosa de ser ciudadana canadiense.
Su hija, Olivia, dijo que la ceremonia de la ciudadanía era divertida y dijo que lo que le gusta de Kelowna son todos los parques para jugar, el lago para nadar y los grandes amigos que ha hecho aquí.
Mientras tanto, otra familia del otro lado del mundo también estaba celebrando después de tomar el juramento de ciudadanía canadiense en Kelowna el miércoles.
Nelson Eziekwu y siete miembros de su familia agitaron orgullosamente las pequeñas banderas canadienses que les dieron después de ser juramentados como nuevos canadienses.
Anteriormente, el nativo de Nigeria, llamó a Canadá una «tierra de oportunidades para todos».
Y, agregó, Kelowna, es el mejor lugar para criar una familia.
La multitud también incluyó a Michael Jell, de 67 años, un artista de Vernon que vino a Canadá hace 50 años con su familia.
«Canadá es todo lo que quiero en un país», dijo. «Me siento muy canadiense.»
Y por suerte añadió: «Y me encanta el hockey.»
En su discurso a los nuevos canadienses, Trudeau dijo que otros países podrían hacer algo peor que mirar a Canadá y la forma en que hace las cosas, se ocupa de los problemas y se une como nación.
“Y permítanme ser uno de los primeros en agradecerles por escoger Canadá”, dijo. “Y por elegir vivir con nosotros.”
