En su estudio, los investigadores encontraron que el 15 por ciento de las parejas, donde ambos cónyuges tenían entre 25 y 64 años y habían llegado a Canadá desde 2017 hasta 2019 con hijos menores de 18 años, no habían presentado declaraciones de impuestos T1 en su año de llegada o el año siguiente.
“Entre las clases de inmigración, las familias cuyo solicitante principal era un refugiado tuvieron las tasas más altas de presentación con un 96 por ciento, mientras que aquellas cuyo solicitante principal era un Trabajador Calificado Federal (FSW) tuvieron la más baja, con un 74 por ciento”, informa Estadísticas Canadá.
“Las familias donde el solicitante principal no tenía un título universitario al llegar eran más propensas a presentar declaraciones, con un 91 por ciento, en comparación con aquellas con un título de posgrado al llegar, con un 79 por ciento”.
El acceso a servicios de asentamiento, que varía algo de provincia a provincia y por programa de inmigración, podría explicar algunas de las diferencias en la tasa de presentación de impuestos de los inmigrantes recién llegados.
Los refugiados más propensos a declarar impuestos que los inmigrantes que llegan bajo el FSW. Los refugiados, que son los más propensos a presentar informes de impuestos poco después de llegar, también son la única clase de inmigrantes que tienen acceso al Programa de Asistencia para el Reasentamiento (RAP).
Los investigadores sugieren que se necesita realizar más estudios para identificar a los posibles beneficiarios de las ventajas fiscales canadienses entre los inmigrantes recién llegados, pero el estudio también admite que esto no será una tarea fácil.
“Establecer un grupo de beneficiarios no es un proceso sencillo de ninguna manera. Algunos inmigrantes pueden regresar a su país de origen o conseguir trabajos fuera de Canadá, por lo que la emigración de inmigrantes representa un desafío significativo”, señalan los investigadores.
“Además, la migración internacional se ha vuelto cada vez más fluida y la línea entre la migración temporal y permanente se ha difuminado… Esto plantea la pregunta de si incluir a los inmigrantes que dejan Canadá como parte de la población objetivo de beneficiarios”. La tasa de declaración de impuestos de los inmigrantes recién llegados ha estado mejorando desde mediados de la década de 1990.
“Alrededor del 89 por ciento de los inmigrantes del grupo de llegada de 2017 a 2019 presentaron una declaración de impuestos en el año de llegada o el año siguiente”, señalan los investigadores.
“Esto es notablemente más alto que la tasa (del 83 por ciento) observada para el grupo de llegada de 1993 a 1996… y marginalmente más alta que las tasas observadas para la mayoría de los grupos subsiguientes”.
