Por Tamsyn Burgmann, The Canadian Press – vie, 03 de octubre 2014 06:17 AM EDT
VANCOUVER – La Primer Ministra de British Columbia, Chirsty Clark, ha acusado a los políticos federales de las reformas “trágicamente mal dirigidas” sobre la cuestión de trabajadores extranjeros temporales, mientras ella busca en el extranjero a miles de trabajadores calificados necesarios para su industria de gas natural.
Clark tomó una postura valiente en un discurso a la comunidad de negocios de la provincia, justo por delante del regreso de su gobierno a la legislatura y la introducción de las nuevas leyes LNG.
En el almuerzo, ella dijo al Consejo de Comercio de Vancouver, que como el desarrollo en la campaña electoral, los líderes en Ottawa deben parar de jugar con la política sobre el controvertido programa.
“No debemos pensar mal acerca de las personas que vienen de todo el mundo a la Columbia Británica para trabajar, que son algo menos que el resto de nosotros” dijo, después de poner las prioridades de su liberal gobierno.
“Así que mi consejo a los políticos federales es el siguiente: si se desea fijar el programa de trabajadores extranjeros temporales, tal vez debería empezar con el cambio de nombre. Ellos podrían llamarse “nuevos canadienses potenciales”, porque van a venir aquí para ayudarnos a construir nuestro país”.
La Primer Ministra añadió de propia voz, argumentando a otros críticos líderes de provincias occidentales de la revisión del programa del gobierno federal, que las nuevas reglas son demasiado onerosas para las provincias que enfrentan escasez de mano de obra.
En Junio, el Ministro Federal de Empleo, Jason Kenney, presentó los planes para limitar el número de trabajadores extranjeros que puedan ser contratados por pequeñas y medianas empresas. Kenney también incluye penas más duras para las empresas que se encuentren en violación de las reglas y ordenó inspecciones para impedir abusos.
El Primer Ministro de Alberta, Jim Prentice, dijo que la política laboral superará su agenda cuando él consiga una primera reunión con el Primer Ministro, Stephen Harper.
Los liberales de British Columbia también quieren mitigar una escasez previa de mano de obra, que solo se harán más grandes si los planes de LNG tienen éxito.
Clark dijo que su gobierno está tratando de volver a diseñar programas de educación secundaria y post-secundaria para garantizar a los jóvenes una formación adecuada para el trabajo que demanda la competencia intensiva. Pero incluso el cortejo de trabajadores de otras provincias no será suficiente para satisfacer la demanda, advirtió en la reunión. La única opción será buscar en el exterior, mencionó.
De acuerdo con el Departamento de Migración Federal, el programa de trabajadores extranjeros temporales está destinado a ayudar a los empleadores a cubrir escasez a corto plazo en el mercado laboral.
“La mayoría de los trabajadores extranjeros temporales se limitan a trabajar en Canadá durante cuatro años antes de tener que regresar a su país de origen”, afirma el sitio web de Citizenship and Immigration Canada.
Dice que esos trabajadores tendrían la oportunidad de solicitar la residencia permanente con otros programas, como el Programa de Nominación Provincial.
No está claro como los comentarios de Clark no cuadran con la naturaleza temporal del programa.
Ella dijo a los reporteros después de su discurso, que no pudo dar cifras sobre qué proporción de la economía tendrá que depender de los trabajadores temporales.
“El hecho es que a medida que estamos construyendo (LNG) va a ser un incremento en el número de trabajadores que se requieren. Esos trabajos serán de carácter temporal”, dijo.
“Hemos hecho un poco de trabajo estimando como podría lucir”.
Cuestionada específicamente acerca de la discrepancia, la oficina de Clark no dio una respuesta directa.
Un abogado de migración en British Columbia, dijo estar impresionado con la pasión de la Primer Ministra y espera que siga en la búsqueda de una solución laboral.
Richard Kurland dijo a British Columbia que ya tiene uno de los mejores programas de selección provincial en Canadá, pero sigue en entre dicho cuando se trata de seleccionar a los migrantes económicos.
“Existe una verdadera necesidad de trabajadores extranjeros temporales” dijo, al tiempo que observa que la adopción de una postura podría tener un costo político.
“El Primer Ministro tiene que tener el coraje político para ser capaz de decir ‘no’ a los trabajadores extranjeros que son buscados por las grandes empresas y para decir ‘si’ a los trabajadores extranjeros que no son buscados por los sindicatos”.