Publicado por Edmonton Sun, 20 de Marzo del 2019
El gobierno de Trudeau no puede controlar quién ingresa al país y continúa permitiendo que cientos, a veces miles, de personas al mes crucen ilegalmente la frontera, pero ahora quieren seguir la pista de quién se está yendo del país.
Las regulaciones publicadas en Canada Gazette muestran que la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá está buscando ampliar los controles de salida para cualquier persona que abandone el país.
«El Gobierno de Canadá actualmente no tiene acceso a información de salida confiable sobre todas las personas que abandonan Canadá», se lee en la publicación.
El abogado de inmigración Richard Kurland dice que hay aspectos buenos y malos de esta política: la capacidad de imponer impuestos sería un aspecto positivo, pero agrega que también habrá problemas de privacidad.
«Puede que no haya una supervisión insuficiente para garantizar que los propietarios de los programas y otros socios del departamento gubernamental sean responsables de cómo se usa y comparte la información personal en la Iniciativa de Entrada – Salida», indica el documento.
Los controles para ingresar y salir se remontan a 2001 y los días posteriores a los ataques del 9/11. Los estadounidenses instituyeron la Iniciativa de Viajes del Hemisferio Occidental, que era el programa del gobierno que requería que los canadienses usaran su pasaporte para ingresar a los Estados Unidos, incluso en los cruces fronterizos terrestres.
Bajo este nuevo plan, las aerolíneas deberán enviar múltiples informes sobre quién volará fuera del país hasta 72 horas antes del vuelo y hasta una hora después del despegue con información completa sobre los pasajeros y la tripulación.
El gobierno estima que las nuevas regulaciones agregarán hasta $ 11 millones al año a los costos del gobierno y hasta $ 18 millones adicionales en costos regulatorios para las empresas.
