Los que vienen a este país y trabajan duro debe tener una oportunidad justa y razonable de convertirse en ciudadanos canadienses. Igualmente, Canadá no debe explotar a las personas vulnerables del extranjero que llegan a nuestras costas.
Este compromiso, hace mucho tiempo está protegido por los gobiernos de distintos partidos políticos, ya que ha sido abandonado por Stephen Harper. Su Ministro de Inmigración, Jason Kenney, ha estado al frente del Programa de Trabajadores Extranjeros Temporales desde que fue nombrado para el cargo en octubre del 2008. Durante casi seis años, Kenney ha jugado un papel de liderazgo en el rápido aumento del número de trabajadores extranjeros que han venido a Canadá.
Ahora, él quiere que creamos que ha tenido un cambio de corazón.
Anteriormente, el gobierno conservador alentó una expansión del Programa de Trabajadores Extranjeros Temporales mediante la aceleración del proceso de la Opinión de Mercado Laboral. Esto condujo a un aumento en el número de trabajadores extranjeros poco calificados en Canadá. Los conservadores también cambiaron las reglas para que los empleadores puedan pagar a los trabajadores extranjeros menos que sus contrapartes canadienses. Mientras tanto, no hicieron nada para detener el abuso desenfrenado de estos empleados.
Kenney nos quiere hacer creer que él es un caballero blanco, que está aquí para salvar a los canadienses de los empresarios malvados que han engañado al gobierno. Pero sabemos que este no es el caso. Mientras que el ministro dice que ha restringido el acceso a la corriente de trabajadores extranjeros temporales menos calificados, permitió a aproximadamente 16.000 personas en el país el año pasado, ignorando mucho el programa más grande, Experiencia Internacional en Canadá. Este programa, admitió a 58.000 personas en 2012, y fue anunciado por el gobierno como un medio para cubrir puestos de trabajo para el sector de servicios de baja calificación y que prácticamente no tiene control o mecanismos de supervisión.
Fue decepcionante que su reciente anuncio no proporcionara nuevos caminos hacia la ciudadanía para los trabajadores extranjeros temporales. A lo largo de nuestra historia, se han brindado vías para la ciudadanía que ha sido el núcleo de la política de inmigración en Canadá. Una encuesta reciente muestra que la mayoría de los canadienses están de acuerdo con este tipo de política y quieren ver más opciones para que los trabajadores extranjeros temporales, puedan obtener la ciudadanía.
El historial de Kenney, cuando se trata de trabajadores extranjeros temporales, es más bien un fracaso. No tenemos absolutamente ninguna fe en la capacidad de este gobierno para reprimir los abusos del Programa de Trabajadores Extranjeros Temporales, especialmente mientras Kenney esté a su cabeza.
Justin Trudeau, líder del Partido Liberal de Canadá y diputado por Papineau
John McCallum, Diputado Liberal por Markham-Unionville
