Quebec está recibiendo una parte cada vez menor de los nuevos inmigrantes de Canadá, y significativamente inferior a su parte proporcional nacional, ya que mantiene estrictos límites a los recién llegados, incluso cuando el gobierno de Trudeau sigue abriendo las puertas a una mayor cantidad de inmigración a nivel nacional.
Según las cifras proporcionadas por el gobierno al National Post, Canadá recibió a 437,000 inmigrantes en 2022, ligeramente por encima del objetivo de 431,000 fijado por el gobierno de Trudeau. Esta cifra seguirá creciendo, y el Gobierno pretende atraer a más inmigrantes cada año, hasta alcanzar los 500,000 en 2025.
Los recién llegados a Canadá se dirigieron a todas las provincias y territorios y, en la mayoría de los casos, el número de inmigrantes que acogió una provincia se ajustó estrechamente a su porcentaje respecto a la población de Canadá.
La situación en Quebec
Pero Quebec acogió a 68,820 personas, aproximadamente el 15.7% de los inmigrantes en Canadá, a pesar de que la provincia representa casi el 23% de la población de Canadá.
Por el contrario, Ontario acogió a 184,000 inmigrantes en 2022, el 42% del total que llegó a Canadá, a pesar de que Ontario representa el 38% de la población canadiense. Y Columbia Británica acogió a más de 61,000 personas, casi tantas como Quebec, a pesar de que su población es de 3.5 millones de habitantes menos que la de Quebec.
Quebec controla el número de inmigrantes económicos que acoge cada año y el Primer Ministro de la provincia. François Legault, declaró en septiembre que acoger a más recién llegados sería «un poco suicida» para la cultura y la identidad de Quebec.
Su Ministro de Inmigración dejó claro que el gobierno no aumentará los niveles por el momento.
«La intención del gobierno federal de aumentar significativamente sus umbrales de inmigración en los próximos años es preocupante. Reiteramos que corresponde a Quebec -y sólo a Quebec- establecer sus umbrales de inmigración permanente», declaró la oficina de la ministra Christine Fréchette en un comunicado, que el Post tradujo del francés.
El ministro afirmó que Quebec tiene que limitar la inmigración a los francófonos para proteger la lengua francesa.
«Quebec, como nación francófona, también tiene el deber de frenar el declive del francés en su territorio y garantizar su protección. Tenemos la responsabilidad de dar a todos nuestros recién llegados las herramientas para desarrollarse en francés en Quebec”.
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Preguntando por el desfase, la oficina del Ministro federal de Inmigración, Sean Fraser, no abordó la cuestión directamente. No obstante, comentó que los liberales siguen creyendo que su plan es el adecuado para Canadá.
«Los inmigrantes recién llegados desempeñan un papel crucial en el futuro de nuestras comunidades y nuestra economía», declaró el secretario de prensa Bahoz Dara Aziz. «Nuestro país debe seguir aumentando su población si queremos satisfacer las necesidades de la mano de obra, reequilibrar una población que envejece, seguir reuniendo a las familias y cumplir nuestros compromisos de apoyo a algunas de las personas más vulnerables del mundo».
El Primer Ministro Justin Trudeau dijo en diciembre que Quebec podría aumentar fácilmente sus niveles de inmigración sin dañar la lengua francesa de la provincia y que debería traer más gente a Canadá.
¿Impacto económico?
Véronique Proulx, presidenta y consejera delegada de la Asociación de Fabricantes y Exportadores de Quebec, dijo que la provincia necesita desesperadamente a esos inmigrantes recién llegados, porque hay escasez de mano de obra en todas partes.
Según sus cálculos, el año pasado se perdieron 7.000 millones de dólares en producción manufacturera debido a la escasez de mano de obra.
«Cuando no se tienen los trabajadores necesarios, se cierran algunas líneas de producción. Vas a cerrar tus turnos de noche porque no puedes encontrar gente», dijo.
Proulx afirma que ha tenido noticias directas de empresas que están frenando ampliaciones o rechazando nuevos negocios porque, sencillamente, no tienen personal para hacer el trabajo.
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Entiende que el gobierno provincial quiera proteger el francés, pero muchos de los puestos de trabajo vacantes se encuentran en regiones de la provincia donde los recién llegados tendrán que aprender rápidamente.
«Dirán que estas personas aprenderán francés rápidamente porque, si no, no podrán desenvolverse en la sociedad», explicó.
Dijo que los fabricantes reconocen que necesitan invertir en automatización y mejoras de sus instalaciones, pero necesitan que el gobierno trabaje con herramientas como la inmigración para cubrir la escasez.
«Realmente necesitamos que el gobierno de Quebec se asocie con nosotros para poder encontrar soluciones que favorezcan el crecimiento de nuestro sector».
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Fuente: NationalPost
