Se niega la entrada a una profesora, resaltando el poder que lo oficiales de aduana tienen desde hace tiempo.
Teacher denied entry to U.S. highlights long-standing powers of U.S. customs officers
Una profesora de Primaria, proveniente de un suburbio en Vancouver, siente temor de cruzar la frontera entre Canadá y los Estados Unidos.
Nació y creció en Canadá, pero nunca se ha sentido de esta manera. Pero un intimidante encuentro con un oficial de aduana de Estados Unidos en Abril del 2016, después de que a ella y a su amiga les fuese negada la entrada a Estados Unidos, lo cambio. Ella hablo para el National Observer, de manera anónima y solo las letras iníciales de su nombre “N.S”.
La ultima primavera, N.S. de 30 años con una gran pasión por la música, se dirigía a Seattle, Washington con una amiga para actuar con coro de Vancouver. Cuando las mujeres, ambas Indu-Canadienses Musulmanas, alcanzado el Arco de la Paz en el paso de frontera terrestre entre C.B. y Washington, fueron llevados a un área de inspección para más interrogatorios.
Al principio los oficiales se mostraron amistosos, haciendo preguntas usuales acerca del porque “las damas” se dirigían al sur y se les fue solicitado su pasaporte. Después les pidieron esperar, antes de volverlas a llamar en múltiples ocasiones para más información, documentos, y eventualmente, sus huellas digitales fueron tomadas.
Después de ser cuestionadas durante una hora, a N.S y su amiga les fue negada la entrada a Estados Unidos bajo el argumento de que no contaban con una visa para desempeñarse profesionalmente, dice ella.
De acuerdo a las normas, cualquier principiante que no se desempeñe a cambio de un pago, puede entrar como turista. Las dos mujeres, quienes cantan como pasatiempo, se dirigían a Seattle como voluntarias. Todos los demás integrantes de su coro conformado por unas 30 personas, ninguno de ellos musulmanes o del sur de Asia, cruzaron la frontera sin problemas.
Como otros Canadienses a los cuales recientemente les fue negada su entrada a Estados Unidos, incluyendo a una mujer de Montreal, que tenia videos religiosos en su teléfono celular y a una Atleta de la pista canadiense de origen Marroquí, N.S es Musulmana, pero a N.S. le fue negada su entrada mese antes de que Donald Trump fuese electo Presidente y diera la orden de “prohibición de viaje”.
Aun cuando las políticas de inmigración de Trump provocan criticas globales, casos como el de N.S subrayan cómo la frontera de Estados Unidos y Canadá ha sido un espacio donde los canadienses pueden ser sometidos a escrutinio por aplicación de la ley de los Estados Unidos sin las mismas expectativas de privacidad que tendrían de la aplicación de la ley canadiense.
Pero ahora que Estados Unidos tiene una administración hostil ante inmigrantes y Musulmanes, el grado al que los canadienses están sometidos al escrutinio bajo esos mismo roles parece aumentar. Este desarrollo, combinado con las enmiendas a la Ley de Inspección, ha dejado a algunos abogados alarmados acerca de que los Canadienses puedan enfrentar un incremento en escrutinio y discriminación cuando cruzan la frontera.
“Es importante recordar que los Canadiense no tiene derecho de entrar a Estados Unidos” dice Laura Track, una abogada en la Asociación de Libertad Civil en Columbia Británica. “Los oficiales fronterizos de Estados Unidos han tenido siempre el poder de cuestionar a viajeros potenciales y negar el acceso al país.”
Tiempo antes de Trump, los oficiales de aduana, hacían uso de su poder a discreción para negar a Canadienses la posibilidad de cruzar por una gran variedad de razones, añadió ella.
Abogados en Canadá están particularmente preocupados por enmiendas a la ley de inspección de Bill C-23 que fue negociada por los gobiernos de Canadá y Estados Unidos antes de la llegada de Trump al poder para facilitar el movimiento de personas y mercancías.
La ley sugerida podría permitir a los oficiales de Estados Unidos monitorear a los Canadienses para su entrada a Estados Unidos en áreas previamente designadas en suelo Canadiense. Esto les garantiza amplias facultades en suelo canadiense, como el derecho a buscar y ejercer su discreción, mientras que quita el derecho de los canadienses a retirarse sin previa autorización y sin explicar ellos mismos. Si un oficial está insatisfecho con sus razones, ellos pueden ser detenidos.
“El gobierno de Estados Unidos ha realizado recientemente declaraciones perturbadoras, las cuales han ascendido las preguntas acerca de la posibilidad de que oficiales de aduana puedan ejercer sus poderes,” dice Vance Langfors, un abogado de Caligary y el Presidente de Sección de Ley de Inmigración de la Asociación de la Barra Canadiense.
Pero el Primer Ministro Justin Trudeau, el mes de Febrero dijo a periodistas que los Canadiense en zona de pre aprobación en Canadá, serían protegidos por las Leyes Canadienses.
La Ley sugerida dice que “Ejercer cualquier poder y ejercer cualquier actividad o función por un oficial de pre-autorización de Estados Unidos, está sujeto a la Ley Canadiense, incluyendo la Carta Canadiense de Derechos y Libertades, la Carta Canadiense de Derechos y la Ley Canadiense de Derechos Humanos».
Sin embargo, Langford dijo que la redacción de Bill C-23 es demasiado vaga para asegurar que oficiales de los E.E.U.U. que no estén familiarizados con la legislación canadiense no crucen la línea y les de demasiado poder para realizar búsquedas invasoras.
Fuente: National observer
